Mi hermana tiene una frase que, personalmente, no me gusta mucho pero que en esta oportunidad no podía ir mejor. Así que con su permiso la voy a utilizar y de paso le dedico estas galletas a ella. Su frase dice: "Esa es la verdad de la milanesa". Y la verdad de la milanesa en esta oportunidad es que, a fuerza de sabor y resultado, no debiera publicar la receta que sigue. No obstante, creo que es importante dar a conocer un fracaso de esta naturaleza porque si no me equivoco el trasfondo del tropiezo no es sino una falla dialectal.
Veamos...
Carmen, mes a mes, propone una receta dulce y otra salada del maravilloso cuaderno de recetas de la Tía Alia. Desde que comencé a sumergirme en estos menesteres del blog, me he dejado sorprender por resultados más o menos disímiles ante la misma receta. La Tía Alia supone un tanto de creatividad, ingenio, paciencia y ciertos conocimientos, al menos empíricos, para que sus recetas se dejen degustar.
Este agobiante mes de enero lo pasé en las sierras, Panaholma: sin internet, sin teléfono, con muy poco de todo. Entonces en uno de mis esporádicos retornos a la civilización corté y pegué la receta dulce de la Tía para este mes de enero, guardé los ingredientes en la misma canasta del mate y retorné a ese paraíso que es para mí Panaholma. Sospeché de ante mano que podía tener problemas con la "harina de maíz" pero estaba decidida a librar batalla y esa misma convicción es la que me lleva a publicar el resultado aunque, claro está, dista muchísimo de las publicaciones espectaculares que ustedes mismos podrán comprobar si entran aquí.
El resultado no fue completamente malo. Las galletas las comimos e incluso, descubrimos, que untadas con dulce de leche (mi esposo) o queso fresco (tipo cuartirolo lombardo, yo) resultaban un tentempié de lujo.
Para mí la harina de maíz no es otra cosa más que la harina para preparar polenta. Luego del resultado más o menos aceptable recordé que hace algunos meses tuve una conversación con Pily de La cocina mexicana de Pily en donde le arranqué un "Nooooooooooooooooo.... la harina de maíz para polenta no te va a servir para las tortillas!!!". Así de grande fue su susto ante mi descarriada imaginación gastronómica. Y creo que cometí el mismo error. La harina de maíz no debe ser la que usamos para hacer polenta sino más bien la que se usa para preparar tortillas. Tarde pero lo aprendí, de todas maneras no he visto por acá más que fécula de maíz (o Maizena) o bien la harina de maíz para preparar polenta.
El resultado fue una galleta cuya textura inicial recordaba a los blinies, luego endurecieron un poco y ahí fue que descubrimos los topping como acompañamiento ideal. Para mí las cantidades de manteca y azúcar fueron las adecuadas. Usé un azúcar granulada orgánica así que al final se dejaban sentir los granitos de azúcar que contrastaban con el sabor neutro de los granos de polenta.
Finalmente, un molde como el que usa Mara (gracias a quien pude ponerle nombre a ese molde que me imaginé pero de cuya existencia no sabía) creo que es la solución perfecta. A fin de cuentas, estas galletas como pequeños bocaditos para dips me parecieron perfectas.
Para resumir, la verdad de la milanesa es que:
- Usé lo que conocemos como polenta, o harina de maíz para preparar polenta, pero creo que la receta se refería a un ingrediente bastante distinto a ese.
- Como el resultado es una masa desleída, un molde que ajuste el contenido en cuanto a forma y tamaño no viene nada mal. En mi caso, dejé reposar la mezcla unos 30 minutos en la heladera (nevera, refrigerador) para poder ubicarlas luego a cuchara sobre la placa de horno.
- Algunas de las galletas fueron al horno con una lluvia de coco rallado. Fue también un topping acertado.
Mi versión de la receta:
1 1/2 taza de harina de maíz orgánica para preparar polenta, de cocción en 1 minuto1 taza de leche
2 huevos de campo
1 cucharadita de sal
1 cucharadita de manteca
4 cucharadas de azúcar granulada orgánica
1 cucharadita de polvo para hornear Royal
Entibiar la leche ligeramente y disolver en ella la manteca. Reservar.
En un bol mezclar los ingredientes secos. Añadir los huevos y la leche con la manteca. Mezclar muy bien hasta homogeneizar. Dejar reposar unos 10 minutos a temperatura ambiente y luego 30 minutos más en la heladera a fin de obtener una pasta lo suficientemente sólida pata tomar porciones de a cucharadas.
Disponer en una placa enmantecada y enharinada. Cocinar en horno moderado por unos 10 minutos o hasta dorar.
Pero seguro quedaron deliciosas, verdad??
ResponderBorrarPorque eso es lo que importa y ponerles coco por encima, qué buena idea!!
Me alegra que ya estés de vuelta!
Un beso
Gracias, Esmeralda.
BorrarDebo decir que añoro pasar más tiempo en las sierras. Panaholma es un lugar de ensueño, añ menos para mi naturaleza un poco taciturna.
Lo importante es que el sabor estuviera bueno. Seguramente al usar la harina de polenta no se obtiene el mismo resultado, aún así tienen un bonito color que invita a comerlas.
ResponderBorrarA veces estar un poco desconectada también se agradece, aunque nos hemos acostumbrado tanto a las tecnologías que se echan de menos.
Besos.
¡Tenés razón en cada una de tus opiniones, Ana!
BorrarSe trata de conseguir un equilibrio, la más de las veces. ¡Saludos!
Querida Silvia, llegues a la hora que llgues y el día que llegues, tu participación es bienvenida. No sabes cómo he disfrutado leyéndote (es que da gusto cómo escribes) y comprobando que eres de las mías, de esas personas que no se rinden con facilidad y que, al margen de los resultados, avanza en su propósito. En este caso, la publicación de tus galletas.
ResponderBorrarHan dado mucha guerra y sorprendido a más de un participantes. Yo incluida.
Me alegra haber contado contigo en el reto de este mes y espero que, las dificultades con las que te has encontrado, no te echen para atrás a la hora de decidir sumarte al reto en futuras ocasiones.
El próximo lunes publico las recetas de febrero así que ¡ojo al blog!
Bss y un abrazo sincero :)
Gracias, gracias, gracias (totales) querida Carmen por tus palabras tan sinceras y cariñosas.
BorrarMe quedo intrigada con la harina de maíz y pinso seguir intentando estas galletas hasta darles la vuelta que se merecen. En cuanto a los retos venideros, por supuesto que me encantará participar. La cuestión es si estaré a la altura de las circunstancias. ¡¡!!
Gracias nuevamente. Tu blog es para mí un lugar de aprendizaje continuo y un espacio de intercambio gastronómico y cultural maravilloso. En ese sentido, tengo pendiente el boxing day cuya historia y cake desconocía y me he quedado tentada de prepararlo.
Cariños allende el mar.
Yo también hubiera usado polenta... puede ser que semolín funcione mejor? El tema de la harina de maíz acá es limitado. Me anoté para participar el mes que viene! El coco me parece buena combinación.
ResponderBorrarHola, Paula. ¡Buena idea lo del semolín! Pensé en probar con harina de amaranto la próxima vez, aunque -claro está- me queda la duda acerca de qué es la harina de maíz que se utiliza en la versión original.
BorrarCreo que si vos también participás tengo más posibilidades de alcanzar un resultado exitoso la próxima vez. ¡veremos con qué nos sorprende la Tía Alia la próxima entrega!
Seguimos en contacto.
para mi la harina de maíz es igual a polenta... será q es la única q tenemos a mano? la he usado en recetas dulce q pedían harina de maíz, y me gusto mucho el resultado!
Borrarsi tengo tiempo, me sumo con ustedes al próximo reto! así intentamos descubrir con q reemplazar los ingredientes! jaja
Hola, Juli.
BorrarMe gustó eso de que te sumes. Pensé en lo mismo cuando Paula dijo que trataría de participar: va ser bueno tener con quién compartir puntos de vista para alcanzar resultados satisfactorios.
No me amedranto con la harina de maíz. Ya le voy a dar la vuelta.
De polenta que rica.
ResponderBorrarun saludito
Quedaron buenas, Mijú, es cierto.
BorrarSi yo creía que estabas fuera de juego y mira por donde aquí tenemos tus galletas totalmente diferentes al resto. Eso de luchar, me parece que lo hemos hecho casi todas, porque la receta se las traía, verdad de la milanesa, ja,ja menuda frase, a ver si no la olvido, que seguro que cuando la pronuncie, me mirarán con una cara.
ResponderBorrarTe he leído y sólo te digo que no vuelvas a decirme que escribes mucho, a mí me encanta leerte y tengo que tomarme tiempo para contestarte. Es un gran placer que nos conozcamos y nos apreciemos tanto, a pesar de la distancia.
Un beso fuerte y disfruta mucho.
Coincido en cada una de tus apreciaciones, querida Marisa. Espero ansiosa tu respuesta aunque, claro está, tomate tu tiempo.
Borrarla frase de mi hermana es TAN ocurrente ... casi como ella misma. Sinceramente no es de mis favorita, pero esta vez quedó como a pedir de boca cuando empecé a escribir y ahí la dejé.
Cuidate y seguimos en contacto.
Hola Silvia, te echábamos de menos. Creo que la Tía Alia está dando más de un dolor de cabeza. Me parece que la receta se refiere a la Maicena, en España se comercializa como harina fina de maíz y hasta hace relativamente poco tiempo era la única que había, al menos de manera general. Con la llegada de inmigrantes con otras costumbres gastronómicas empezó a comercializarse la harina de maíz que se usa para la polenta. Aún hoy, para la mayoría, la harina de maíz es la Maicena. Muchos besos y aunque me alegro que estés de vuelta, me parece que se han acabado tus vacaciones, no? Bueno, ánimo para continuar.
ResponderBorrarHola, Rosa.
Borrar¡Gracias por tus palabras de bienvenida! Es cierto lo de dolor de cabeza ... ja-ja!! Hasta último momento dudé acerca de si la harina de maíz sería polenta o maizena u otra cosa, pero no tenía dónde consultar. Pienso intentar próximamente con algunos cambios en la harina, sin dudas.
Estamos de vuelta. Es así. Cariños!!
Hola Silvia! Qué bueno que hayas vuelto!! y en qué paraíso pasaste las vacaciones!! Espero que hayan sido reparadoras para empezar la faena en febrero...
ResponderBorrarQué interesante textura deben tener esas galletas... una vez hice un pan con polenta y quedó bastante bueno, pero se secó mucho al día siguiente.
Me da mucho gusto leerte, así que explayate cuanto quieras y puedas!
Un beso desde la Villa que está de festival
Querida Mónica: gracias por pasarte por acá. Y gracias por hacer mención a mi manía de charlar in extenso. Sé por as noticias que el festival ha sido todo un éxito. Cuánto me alegro por eso. Tengo un viaje pendiente a Villa María porque he dado por internet con un productor de frambuesas y estoy alucinada con el descubrimiento.
BorrarNos mantenemos en contacto.
Hola Silvia, que bueno saber de ti nuevamente, ya pasaron esos días de navidad y todos nos reintegramos a nuestras labores, al diario vivir. Lo de las galletas a todos nos pasa, fracasé una vez con unos mantecaditos, pero me los comí.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo,
Cecilia
¡Hola, Cecilia!
BorrarEs cierto, luego de la Navidad poco a poco vamos retomando el ritmo habitual. La Navidad coincide con las vacaciones escolares de verano así que le suma algunas semanas más de descanso.
Me gusta estar de vuelta. ¡Cariños!
Hola Silvia. Es la primera vez que visito tu blog y me ha encantado lo que has escrito. ¡Nadie dijo que la cocina fuera siempre perfecta! Mas de una vez, preparando alguna receta, he tenido que terminar tirándolo todo porque el desastre era tal que ni el más hambriento podría comérselo. Pero lo bueno es ver qué ha fallado e intentarlo otra vez. Y te digo que tus galletas tienen buena pinta.
ResponderBorrarQuerida Cósima:
Borrarme siento halagada por tus palabras y honrada por tu visita, a la vez que te agradezco que dejaras un comentario ya que así he podido conocer tu magnífico blog.
¡Nos seguimos leyendo en este mundo blogueril!
Que bien lucen tus GALLETAS SILVIA...
ResponderBorrarY respondiendo a tu pregunta, efectivamente la fruta es la CHIRIMOYA..
Besos querida, pásalo muy bien.
Gracias, Conxita, por tu amable comentario.
BorrarMe sorprendió lo de la chirimoya, tanto que me puse a leer acerca de ella y así supe que es España es el principal productor mundial de la fruta oriunda de los Andes peruanos. ¡¡Vaya sorpresa!!
Saludos.
Galletas con dulce de leche, qué bien suena, Silvia!!! Y más si se disfrutan en la sierra, y a pesar de todas las dificultades que hayas podido tener para prepararlas. Espero que tu mes de febrero sea menos agobiante ;-)
ResponderBorrarUn besito.
¡¡Quedaron muy bien, Elena!! En cuanto a febrero, afortunadamente, la temperatura ha amenguado un poco y eso ya es todo un alivio.
Borrar¿Cómo habrá estado tu día de cumpleaños? ¿Con qué habrás deleitado a H&M? Espero ansiosa el último post.
Cariños y felicidades en este día tan especial.
Hola! He leído todo el relato y me parece tan acertado! jaja! Yo hice madalenas con esa misma harina, sin T.A.C.C o sea, apto para celíacos, y la verdad es bien desleída la pasta que queda. La he llevado a la heladera también. Y de gusto, deliciosas, pero los granitos de la polenta, como que son extraños a nuestro paladar, así y todo, VOLARON! Voy a ver si pruebo tus galletas para ver como salen. Saludos! :)
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