Todo comenzó cuando en el blog de Érika vi el logo de Revolución en tu cocina. Así conocí la fantástica cruzada que Mai, desde Austria, emprendía contra la explotación laboral en las plantaciones de bananas, ananás y otras frutas tropicales.
Luego, ella nos habló de Marisa, una maestra abnegada como pocas que sin más que su entereza de espíritu decidió librar batalla contra la mala alimentación de los niños en edad escolar: su reto BBSS (recetas buenas, baratas, sencillas y sanas) fue todo un éxito que hoy por hoy la mantiene muy ocupada.
A su vez, Marisa habló de la ocupación de Ana en la campaña Mesa para 7000 millones de Intermón Oxfam. Y acá estoy. Segura de que las cadenas de favores resultan y que están en cada uno de nosotros poner a girar la rueda.
Luego, las coincidencias hicieron de las suyas tanto que Ana y yo quedamos perplejas. Cuando supe de este evento a través de Marisa rápidamente resolví que debía participar y que la receta debía ser mi súper tarta de zapallitos. Llamamos en Argentina zapallitos comunes o redondos a una variedad de los calabacines españoles (pero distintos de los zucchinis o zapallitos largos italianos). Vi en el blog El mercado Calabajío que hay una variedad reciente de zapallitos en España que son los calabacines luna. Nuestros zapallitos comunes son parecidos a esos aunque no tienen la piel jaspeada, sino simplemente verde.
Esta tarta es la que nunca falla, me saca del apuro y resuelve la cena cuando mis hijos van a llegar con mucha hambre. Además no hay vez que no protesten por el menú y al final se la terminen sin chistar y pidiendo más.
Entonces, esta mañana fui a visitar el blog de Ana, para asegurarme de tener todo en orden para esta entrada. Y vaya sorpresa que me llevo cuando veo que su receta es una tarta de zapallitos. No había dudas acerca de que estaba de Dios empezar a recorrer este camino de cocinas y blogs. Estoy especialmente agradecida por la generosidad de Ana ya que con sus más de 800 seguidores se tomó la molestia de recorrer mi blog y contestar mi comentario. ¿Qué más se puede pedir, entonces?
Intermón Oxfam es una organización internacional dedicada a la ciclópea tarea de erradicar la pobreza del mundo en una tarea mancomunada con otras ONG. En esta oportunidad, y por medio de su campaña Mesa para 7000 millones, la asociación hace una llamado a la solidaridad de las personas individuales pidiendo correr la voz de esta iniciativa y solicitando la colaboración de 2 €, que es la suma equivalente al cereal de una semana de una persona de Sahel.
La campaña pone en evidencia el hambre real y concreto de muchas personas en todo el mundo. 1 de cada 8 personas pasa hambre, lo que equivale a decir que se va a dormir sin cenar porque no tiene qué comer. Rosa Montero, en el marco de esta iniciativa, nos propone salir a la calle, contar a las personas que cruzamos y en la octava tendremos el rostro de quien esa noche quizá no pueda conciliar el sueño.
Es un llamamiento a las voluntades individuales para lograr un objetivo social: que no haya hambre en el mundo. ¿seremos capaces de ello?
Mesa para 7.000 millones de personas de Intermón Oxfam,
para que el único hambre que exista sea el hambre de justicia.
Tarta de zapallitos (1 tarta de 32 cm)
Masa
2 tazas grandes de harina común 000
1 cucharada de polvo para hornear (Royal)
1 taza grande de leche y un poquito más
1 taza de café de aceite neutro
sal y pimienta al gusto
Relleno
4 zapallitos redondos
1 cebolla mediana
1 cucharadita de manteca (mantequilla)
2 huevos
100 g de queso fresco apto para gratinar (cuartirolo, mozzarella suave)
1/2 taza de queso rallado (reggianito, parnigiano, sardo, grana pampeana, etc.)
2 cucharadas de crema de leche
1/2 taza de leche
2 cucharadas de avena arrollada gruesa (o pan rallado o queso rallado)
sal y pimienta al gusto
Para la masa:
En un bol colocar los ingredientes y comenzar a integrar con un batidor de alambre o espátula. Una vez que se obtiene un bollo liso tapar y conservar en la heladera. Se trata de una masa de tarta muy versátil por lo que se puede enriquecer con hierbas, especias, queso, a gusto y piacere.
Para el relleno:
Cortar la cebolla a pluma o en una juliana fina. Llevar al fuego en una cacerola caliente con 1 cucharada de manteca y comenzar a dorar a fuego bajo. Cortar los zapallitos en rodajas finas y parejas y agregar a la cebolla. Salar y dejar cocer a fuego bajo y tapado. Una vez que los zapallitos estén tiernos y ligeramente dorados, retirar del fuego y reservar para que baje la temperatura.
En un bol disponer los dos huevos con una pizca de sal y batirlo ligeramente. Añadir la leche, la crema, el queso fresco en cubos y 1/4 taza del queso rallado. Integrar y condimentar con sal y pimienta, al gusto. reservar.
Estirar la masa de la tarta y forrar un molde ligeramente aceitado. Sobre la base de la masa espolvorear las dos cucharadas de avena a los efectos de que la masa no absorba demasiada humedad durante la cocción.
Volver al bol del ligue y añadir lentamente los zapallitos cocidos. No hacerlo al revés (el ligue sobre los zapallitos) ni echar de golpe los zapallitos muy calientes porque correríamos el riesgo de cuajar los huevos.
Integrar y verter esta mezcla sobre la masa. Espolvorear con el queso rallado restante y llevar a horno medio por 40 minutos.
Retirar del horno. Reposar 10 minutos y servir acompañada de hojas verdes y tomates.
Adoro los zapallitos, aunque aquí no es época igual me dejo la receta para cuando lleguen, son tan ricos.
ResponderBorrarHay que apoyar esta causa, estupenda tu propuesta.
Un beso.
Esta tarta está entre mis favoritas, sin dudas. Y los zapallitos también me encantan: rellenos, salteados, hasta hago una versión de moussaka con ellos.
BorrarEn cuanto a la causa es más que noble y contribuir a difundirla es de alguna manera sembrar esperanza por un mundo mejor.
Gracias por darte una vuelta por acá, querida Kako !
Saludos estivales desde el otro lado del mar.
Muchas gracias por tus palabras Silvia, eres muy amable.
ResponderBorrarLa verdad es que todas estas casualidades dan que pensar.
Tu tarta de zapallitos te ha quedado muy bonita y la suerte que tus hijos se la coman aunque empiecen protestando.
Gracias por participar.
Besos.
Gracias a vos por dar a conocer esta maravillosa iniciativa, Ana.
BorrarUhmm qué buena. Yo también te pediría más, como tus hijos. Voy a animarme a hacer tu tarta de zapatillos, ya te contaré.
ResponderBorrarIntermon Oxfam ha tenido una buena idea este año para conseguir la solidaridad con vistas a la campaña de Navidad, buscando la aportación de muchas pequeñas cantidades. Nos faltan algunas grandes cantidades, pero no parece que los grandes estén por la labor.
Un saludo, éste desde los primeros fríos invernales que nos llegan a la península, que me cogieron desprevenida y me han dejado un buen resfriado.
Hola, Rosa !
BorrarEspero que estás recuperada de tu resfrío. Y espero que si hacés la tarta me contés después qué te pareció !
Las grandes revoluciones siempre comienzan con un pequeño gesto. ¡No hay que desanimarse, Rosa!
Cariños y espero que ya estés recuperada.
Hola Silvia, la receta, me encantó, aquí en México, son calabacitas bola y pueden ser oscuras o claras por fuera, me gustó mucho la idea y más si es por una buena causa!!
ResponderBorrarMuchos besos
Me alegro que te gustara, Esmeralda. A mí también me gustó tu receta de zapallitos (aclabacitas) rellenas. De hecho, me encantan los zapallitos rellenos -son una de mis comidas favoritas- y tengo pensada publicar la receta cualquier día de estos. ¡Luego intercambiamos!
BorrarCariños !!
Me encantan los zapatillos, aquí se utiliza más el término de zucchinis. Esta receta me recuerda una que he preparado, una especie de tarta ó quiche de zucchini, es una delicia pero se me ha traspapelado, me voy a poner a buscarla para hacerla y también, hacer la tuya.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo,
Cecilia
Hola, Cecilia.
BorrarEstoy fascinada con la variedad de nombres que recibe esta verdura o vegetal. Tanto que pienso aprovechar el exuberante verano que se acerca y hacer un par de fotos con estas verduras y sus nombres para subirlas al blog y ver qué sale.
Gracias por pasar por acá. Ahora que lo decís, por el tipo de ligue esta tarta calza justo como quiché, sin dudas.
No dejés de contarme qué te pareció la receta si tenés oportunidad de hacerla. Y después intercambiamos con tu versión, claro !
Cariños!
Como voy tan liada no había visto esta entrada en la que cuentas cómo se ha establecido esta cadena entre nosotras.
ResponderBorrarMe encanta la receta y saber mucho más sobre esta verdura que es de las que más uso para mí porque me gusta, pero tb porque no tiene casi calorías. Un besito
Ja-ja!
BorrarHola, Marisa. Ni te preocupes por eso.
Ese dato de las calorías me ha gustado mucho por la inminente dieta que debo comenzar !! ja-ja!!
Besos!