Esta entrada ha de ser como el génesis de mi blog. La tarta de manzanas que presento hoy tiene como misión rendir tributos. Por un lado a La cocina de Auro porque de allí la tomé, pero además se la dedico especialmente a Erika, de La ventolera, porque se la prometí hace muchísimo tiempo y recién ahora cumplo con mi promesa de darle esta versión muy sencilla y húmeda de una tarta de manzanas.
Cuando llegué a esta torta tenía varias recetas de tartas de manzanas en mi haber, pero quería algo muy fácil y rápido de preparar, casi con lo que hubiese en la heladera. Entonces se me ocurrió buscar en internet; puse en el buscador tarta de manzanas fácil y aquí estuvo. Así fue como llegué al universo de los blog de cocina. Debo decir que no entendía muy bien acerca de qué se trataba esto del blog, así que entré con más dudas y temores que certezas, pero siete años después formo parte yo también del universo gastronómico cibernético.
Mi receta presenta algunas variantes con respecto a la receta original de Aurora, pero nuevamente la garantía es plena respecto al éxito del resultado final.
Tarta de manzanas húmeda
Ingredientes
4 manzanas, rojas o verdes de las que tenga por esos días
3 huevos
1 pocillo de café de aceite neutro (maíz o girasol). Si tengo ghee, mucho mejor.
1 taza de harina (jarros de desayuno, 220 g de harina aproximadamente)
1 taza de leche
1/3 taza de azúcar
3 cucharadas de polvo de hornear (o leudante Royal)
1 pizca de sal
1 cucharada de esencia de vainilla
Azúcar para espolvorear o mermelada de duraznos (albaricoques o damascos) para terminar.
Preparar un molde redondo de 26 cm aproximadamente con manteca y papel manteca en la base.
Pelar las manzanas y quitarles el corazón. Conservarlas en agua con limón para que no se oxiden (con esto se evita que toman un color amarronado desagradable a la vista).
En un bol colocar la harina (preferentemente cernida), la pizca de sal, el azúcar, el polvo para hornear, la leche, la esencia de vainilla, el aceite y los huevos. Batir a mano con batidor de alambre (o con batidora -barilla- si se prefiere) hasta integrar muy bien todos los ingredientes y obtener una pasta lisa.
Cortar dos de las manzanas en cubos pequeños y agregárselos con ayuda de una espátula al batido anterior. Mezclar y verter en el molde.
Cortar las otras dos manzanas en tajadas finas y acomodarlas sobre toda la superficie de la torta dándoles la forma que se prefiera: flor, espiral, etc.
Llevamos a un horno precalentado a medio-alto por unos 35 o 40 minutos. Por las manzanas el cuchillo siempre va a salir húmedo así que conviene controlar el color dorado de la superficie y que los costados de la tarta comiencen a desprenderse ligeramente del molde.
Para terminar hay dos opciones: o espolvoreamos con azúcar antes de llevar al horno (foto). O bien, una vez que se retira la torta del horno se la baña con la mermelada desleída a fuego bajo. Para esta tarea lo mejor es ayudarse con un pincel de cocina. Esta segunda opción es la que utilizo cuando debo preparar tartas para colaborar en los eventos escolares de mis hijos porque el resultado es muy vistoso y elegante.
Qué rica Silvia y bien por la Ventolera, estará feliz con su tarta1!!!
ResponderBorrarSaludos
Gracias, Pily !
BorrarY esta ves sí fuiste la primera en comentar !!!
Cariños,
Silvia
Oh, cómo me gustan las tartas de manzana!!!! Son de lo mejor que hay!!!!
ResponderBorrarEsta se ve divina, Silvia, me gusta mucho la receta. Me la llevo, espero poder probarla en el futuro ;-)
Besos.
Gracias, Elena. A mí también me encantan las preparaciones con manzanas ... son tan otoñales y de calor de hogar ... sweet home !!!!
BorrarEspero que tengas oportunidad de hacerla. Cariños y gracias por tu visita.
Silvia
Esta va dedicada a mi!! Muchas gracias, no sabés las ganas de llevarme una porción que me da. El otro día mi hijo hizo una torta en este estilo con una receta de Blanca Cotta con ingredientes similares y doy fe que es muy rica. Tendré que probar tu versión. Por cierto, me encanta el sonido de los álamos cuando bailan con el viento, para mí es todo un placer. Y las hojas parece que danzaran alegremente, como si se quisieran desprender de la alegría que les da!
ResponderBorrarcariños
¡¡Totalmente dedicada a vos, Erika!!! Además, te debo el honor de haber sido el primer blog que comencé a leer con asiduidad.
BorrarA mí también me gustan los álamos y el viento y sobre todo el otoño y sus hojas doradas ...
Cariños para vos también y gracias por pasar por aquí.
Estimada Silvia, muchísimas gracias por pasarte por mi blog. Te devuelvo la visita en la vorágine de los últimos días de mi reto BBSS y espero que todavía te dé tiempo de enviarme alguna recetilla, me hace mucha ilusión que viaje desde tan lejos.
ResponderBorrarVoy de cráneo y no puedo visitar todos los blogs que quisiera, incluso sin el reto, es imposible. Me quedo con esta tarta que viniendo del blog de Auro, tiene que estar deliciosa. Un beso desde Valencia
Por cierto, no conozco las otras iniciativas solidarias de las que me hablas en el comentario